Tendencias decorativas que triunfan. ¡Cópialas para casa!
Estrenar año no implica necesariamente poner la casa del revés. Si hay tendencias decorativas que funcionan de lujo desde hace un tiempo, ¿por qué abandonarlas? Lo ideal es consolidarlas en nuestros espacios sin perder de vista las novedades estéticas que vienen pisando fuerte. Y, por supuesto, decir adiós a las que han dejando de gustarnos. Si os estáis preguntando cuáles son unas y otras, no dejéis de seguir leyendo. ¡Preciosas y sostenibles!
El año de los materiales ecofriendly
Por fortuna, cada vez estamos más concienciados de que cuidar del planeta es sagrado y unido a ello el respeto al medioambiente. Son temas vitales y trasladables a cualquier ámbito de la vida, de manera que la decoración también es sensible a ello. De ahí el impulso desde hace unos años de materiales naturales para recubrir todo tipo de superficies frente a otros que no lo son. Pues bien, todo apunta a que en 2023 esta predilección irá en aumento por lo eficaces que resultan para crear ambientes cálidos y auténticos.
Sí ¿pero cuáles? Toca prestar especial atención a las resinas y arcillas naturales, muchas veces las favoritas como revestimientos de suelos y paredes. Otra solución rey que se consolida es el llamado eco cemento o cemento decorativo: permite crear pavimentos continuos de gran fuerza estética sin necesidad de tener que retirar el suelo base para ser instalado. Además de ser una opción muy recomendada para baños y cocinas donde la higiene debe ser máxima al concentrar poca suciedad. Ya sabéis… si tenéis en mente renovar estos espacios, pensad seriamente en este material sostenible.
Lo hecho a mano: el plus más preciado
¿Quién no está convencido aún de todo lo que aporta lo hecho a mano a nuestros espacios? Es una de las tendencias decorativas que no debemos perder de vista si valoramos rodearnos de objetos llenos de autenticidad y de una belleza imperfecta que da paz al mirarla. Además de ser trabajos sostenibles, que potencian la artesanía local, el comercio de proximidad y el empleo de materiales de kilómetro 0.
El desfile de propuestas artesanales a la hora de decorar nuestros interiores es grande desde hace unos años y va a más. Fantástica noticia. Las pantallas para lámparas cobran especial protagonismo, adquieren una nueva identidad, pero también las cerámicas y los mosaicos se consolidan, las alfombras tejidas a mano... Y por supuesto, los muebles y las piezas de madera: el nuevo lujo en la decoración por la capacidad de esta materia prima para lograr confort de mil maneras. La sencillez por encima de todo manda en los ambientes.
Las formas orgánicas y las superficies muy sensoriales... ¡conquistan!
Si ya conocéis la corriente Bold, enamorada de los espacios amables y de los muebles de formas orgánicas, es de las tendencias decorativas que continuarán en auge este año. El dinamismo que generan en los interiores es uno de sus principales atractivos para los profesionales del sector: desde la presencia de arcos en las estancias, a jugar con piezas de mobiliario que evitan las líneas rectas a favor de las formas suaves. Esta corriente es única para disfrutar de interiores amables, cálidos, poco tecnológicos y de lo más naturales sin derrochar en cuidar especial atención a los detalles.
El boom del papel pintado en cualquier espacio de la casa es otra de esas tendencias decorativas que se afianza entre interioristas, estilistas y enamorados en general de la decoración. Lógico. También han demostrado que dan muchísimo juego para diseñar espacios ricos en texturas, con superficies muy sensoriales que invitan a ser tocadas para recrear gratas emociones. Quizá lo más novedoso para 2023 sea su versatilidad a la hora de lucirse y los numerosos efectos que es capaz de reproducir: texturas aterciopeladas, con relieves, imitando materiales industriales, etc. Una pasada.
Vuelven los tonos crudos, pero con truco
Atención a esta nueva tendencia cromática que deja atrás los colores oscuros, sobre todo en las paredes, como el recurso perfecto para crear contrastes impactantes. Ahora la consigna es concebir espacios con una carta más clara, de ahí que los neutros recuperen gran interés, pero acompañados de pinceladas de tonos vivos que rompan su posible monotonía. Se busca disfrutar de ambientes acogedores, salpicados de colores alegres que no resten armonía ni serenidad. Y al parecer uno de estos favoritos puede ser el color lavanda. En cuanto a los toques cromáticos más oscuros, no es cuestión de decirles adiós definitivamente. Por el momento quedan reservados para pequeños detalles y complementos.
Definitivamente, adiós a los diseños de plástico (no reciclado)
Nuestra preocupación por el planeta entra en conflicto directo con el hecho de seguir viviendo en espacios domésticos con muebles, objetos y todo tipo de complementos fabricados en este material. Salvo que se trate de piezas hechas a base de plásticos reciclados. Eso en cuanto a mobiliario, pero también en el terreno de la iluminación podemos empezar a pensar en olvidarnos de ciertas tendencias decorativas que sin embargo han tenido una gran acogida durante años. Si sois de atmósferas íntimas y luces tenues, la noticia os va a encantar porque estas soluciones vienen para quedarse y llenarnos la casa de una iluminación más envolvente y cálida. Por el momento, adiós a los halógenos y al excesivo uso de focos en el techo.