Teje un cestito de trapillo y alambre

1. Aunque el trapillo lo puedes comprar, siempre mola reciclar cosas viejas. Por ejemplo, camisetas: para este trabajo te bastará con dos de dos colores distintos. Quítales las mangas, ábrelas por un lado y corta tiras de 2 cm de ancho, rasgándolas para que queden de un ancho uniforme.

2. Cuando tengas todas las tiras, puedes empezar a cortar el alambre. Con el alicate, corta 6 trozos de unos 40 cm de longitud.

3. Dispón los alambres haciendo una estrella como la de la foto. Cuando empieces a enrollar el trapillo (desde el centro, pasando la hebra por encima y por debajo de los alambres alternos), enrolla uno de los "rayos" de la estrella sobre el contiguo para afianzar la estructura. Te quedarán 11 "rayos", uno de ellos con el otro enrollado encima.

4. Así se trenza el trapillo sobre los alambres: primero por encima, luego por debajo. Como si fuese el clásico cesto de mimbre. Este trabajo es muy sencillo, ya que el alambre es flexible y te permitirá trabajar con comodidad. Ve apretando el trapillo hacia dentro (sin pasarte). De vez en cuando, deposita una gota de silicona adhesiva con la pistola para afianzar el tejido.

4. Cuando termines la base (cuando llegues aproximadamente a la mitad de los alambres), dobla los alambres hacia arriba para hacer los laterales.

5. Es importante afianzar ahora el trapillo para que no se salga ni se mueva. Para ello, dobla la tira sobre cada alambre como en la foto. En una hilera, dóblala hacia fuera; en la siguiente, hacia dentro.

9. ¿Has terminado? Ahora, dobla los alambres hacia fuera como en la foto. Así asegurarás doblemente el  tejido y darás consistencia al cesto.

10. Con cuidado, inserta los alambres en el tejido para que no se vean. Termina aplicando una gota de cola en el extremo del trapillo para rematar el cesto. También puedes darle una puntada.