Herramientas de carpintería. Los mejores consejos de mantenimiento de profesionales

En cualquier taller donde se trabaje la madera las herramientas de carpintería siempre deben estar a punto para afrontar una nueva tarea garantizando óptimos rendimientos. Nos referimos a sus cuidados y mantenimiento, esas prácticas para que estos utensilios nos duren toda una vida al realizar tallados, torneados y otras aficiones sin perder lo más mínimo de eficacia. Hemos hablado con negocios expertos en madera como los es el de Comercial Pazos para recopilar tips muy muy útiles ¿Queréis cuidarlas como verdaderos profesionales?

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1. Óxido a raya en las herramientas de carpintería

Uno de los males más comunes para cualquier amante de este oficio, da igual que sea a nivel profesional o aficionado, es comprobar que sus herramientas manuales para carpintería tienen óxido. El mejor consejo que nos dan los expertos para prevenir que aparezca es mantenerlas muy limpias y sin humedad. Y la regla debe aplicarse cada vez que se dejen de usar, limpiarlas meticulosamente con un paño seco hasta eliminar el más mínimo residuo de polvo o madera.

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Junto a esto, no debéis olvidaros de cuidar especialmente las partes metálicas de vuestras herramientas para protegerlas de la humedad; una capa ligera de aceite lubricante o cera son suficientes. A la hora de guardarlas, el sitio elegido es más importante de lo que podáis pensar a simple vista. Lo mejor es buscarlas un punto seco, alejado de humedad, y para que la caja de herramientas sea un espacio seguro, sin humedad, podéis recurrir a bolsitas de sílice o desecantes.

2. Miniguía para que las herramientas eléctricas sigan como el primer día

¿Sois más de herramientas eléctricas para la madera? Cumplir con estos requisitos os ayudará y mucho a mantenerlas en perfecto estado y a punto para próximos trabajos:

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• Una vez usada la herramienta eléctrica, tocará limpiarla para eliminar restos de polvo y otros residuos.
• Comprobad que la habéis desconectado de la corriente antes de iniciar cualquier tarea de limpieza o mantenimiento y si la máquina lleva batería, retirársela.
• Revisad con relativa frecuencia los cables de alimentación y enchufes usados habitualmente para comprobar que están bien.
• Lubricad las partes móviles de estas herramientas según lo que aconseje el fabricante de la marca.
• Importantísimo reservar una zona del taller para ellas que sea seco y esté limpio.
• Ciertos mantenimientos preventivos vienen muy bien, como el típico cambio de escobillas en los motores de estas máquinas cuando haga falta.

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3. El afilado de las herramientas de corte, controlado

La frecuencia de afilado de las herramientas de corte es relativo, dependerá del uso que se las dé. En concreto, la mejor señal de que los cinceles y sierras “piden a gritos” un afilado en condiciones será cuando notéis que van perdiendo su filo original y ya no cortan tan bien como antes. En otras palabras, una disminución en su rendimiento de corte. Si usáis estos utensilios con bastante frecuencia, se pueden afilar al cabo de varias semanas, o al mes. Pero si solo los utilizáis ocasionalmente, se aconseja afilarlos cada seis meses. No hay prisa.

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Además del afilado, los profesionales siempre insisten en la importancia de hacerlas mantenimientos periódicos (así podréis detectar desgastes, daños, etc.) y protegerlas adecuadamente cuando no se estén usando y ocupen su sitio asignado en el taller con estuches y otras soluciones específicas. Sobre todo proteger con vainas, gomas y soluciones similares los dientes y hojas de estas herramientas.

4. Larga vida útil para las hojas de sierra

¿Usáis mucho estas herramientas? Son muchas las prácticas que se pueden llevar a cabo para prolongar su vida. La primera de ellas es usar la hoja de sierra más apropiada al material a serrar. Aunque parezca obvio no lo es. Otra es procurar en todo momento que la hoja no se sobrecaliente debido a un uso prolongado, más bien lo contrario, dejar que la herramienta haga su trabajo sin ir forzada. Los sobrecalientamientos pueden dañar su eficacia y la de las herramientas de corte en general. Lo más apropiado cuando se detecta una elevación de temperatura inusual es detener la tarea con la madera que estéis realizando.

En cuanto a su limpieza, lo mejor es que sea periódica, un hábito necesario porque ellas también acumulan polvo y resina. Sobre su almacenamiento, de nuevo toca pensar en sitios libres de humedad y protegerlas bien para evitar golpes y caídas. Y por último, ¿qué pasa con su afilado, cuándo es el mejor momento? La respuesta la tenéis vosotros; cuando notéis que han dejado de cortar tan eficazmente como lo hacían.

5. Martillos, mazas y herramientas de medición

¿Habéis caído en ellos? Es muy importante cuidar los mangos de madera de martillos y mazas. Tienden a resecarse y eso puede hacer que se rajen. Lo mejor para evitarlo es pasarles con un paño de algodón aceite de lino o un producto natural similar. Sobre las herramientas de medición, en ellas valdrá la pena proteger las superficies de madera que llevan, de nuevo con aceite de lino, y engrasar los puntos metálicos si los tienen.

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6. El almacenaje perfecto

Seguro que le habéis dado bastantes vueltas a los requisitos que debe cumplir ese lugar de casa, lo más probable dentro de vuestro rincón de brico, dedicado a guardar estas herramientas de carpintería que tantas satisfacciones os regalan. El mejor modo de almacenarlas es hacerlo de forma organizada, limpia y en un espacio con una buena ventilación a modo preventivo para evitar problemas de humedad. Para materializarlo, existen numerosas soluciones, así que ningún problema.

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Tenerlas a mano es básico y comodísimo y para lograrlo nada como los tableros perforados donde colgarlas… junto a estantes y cajas grandes que rentabilicen bien paredes y huecos difíciles o inutilizados. ¿Y las herramientas de carpintería más delicadas? Porque todos sabemos que las hay y son básicas para vuestras aficiones con la madera. Desde hojas de sierra a brocas… Plantearos guardarlas en fundas individuales o protectores; evitaréis que se estropeen, su filo se mantendrá en perfecto estado y será más seguro para vosotros manipularlas. Y si sois de reciclar y reclicar, aprovechad tableros de madera, palés y cajonerasa viejas pero en buen estado para hacer vuestros propios muebles de almacenaje.