Lijas: un auxiliar básico e imprescindible en trabajos de carpintería
¡Que su sencillez no te confunda!. A la hora de trabajar cualquier superfície, es importante tener en cuenta los distintos tipos de lijas. La diferencia entre un trabajo bien hecho y un trabajo mediocre puede estar en algo tan sencillo como elejir el grano adecuado de una lija.
Los tipos de grano de una lija se indican en el producto y se miden según la cantidad de fibras que tienen. El la actualidad existen gran variedad de granos donde elegir según el trabajo que se vaya a desarrollar. Por ejempo, una lija de grano grueso puede ir desde 40 a 80 fibras; la de grado medio, de 100 a 120 y la de grano fino, de 150 a 220.
La lija de grano grueso se utiliza para suavizar imperfecciones grandes y la de grano fino para perfeccionar los últimos detalles de un trabajo.
Teniendo estos conceptos en cuenta será necesaria una lija de grano cerrado para maderas suaves y una de grano abierto para metales y maderas de más dureza. "Grano cerrado" significa que el material abrasivo que cubre la lija es más compacto que el de "grano abierto"
Otra cosa que tenéis que tener en cuanta es seguir ciertas premisas a la hora de lijar una superficie:
- Realizar movimientos de adelante a atrás
- Usar la lija en una sola dirección al llegar al extremo final.
- Usar una lija de taco para trabajar en superficie plana.
- No hagáis mucha presión al lijar.
- No lijes más de la cuenta podrías cerrar los poros de la madera dificultando por ejemplo que el barniz penetre.
En la actualidad existen multitud de lijas de todos los grosores y formas. En Comercial Pazos, nuestro referente en herramientas para el trabajo de la madera, podréis encontrar una variedad muy extensa de lijas, como esta, con uno de los lados redondeado y otro en forma de cuña, muy útil para ciertos trabajo. Comercial Pazos, siempre nos hace el trabajo mucho más sencillo y llevadero y los resultados son perfectos. ¡A trabajar!
Imágenes: Comercial Pazos y Recycraft.com
